El Atleti sacó pecho
DANIEL CHANONA | 4 DE OCTUBRE DE 2015
MADRID, España.- Se dirá misa, pero el
derbi tiene alma propia. Transpira, palpita, agoniza, revive, amortiza,
envenena, emociona. Distan muchos los años en los que el Manzanares rendía
pleitesía al ‘amigo’ cuando osaba visitarle. Hoy tutea a la Castellana, y la maniata
cuando mengua su prosapia. El Real Madrid se encontró pronto con un remate de
Benzema al poste más lejano del portero, aunque no produjera de sobra en los
minutos posteriores, que fueron vitamina para un Atlético necesitado de
clamores, que no olvida la eliminación reciente de la Champions, y que disfruta
desde antaño amargar la tarde al ricachón. Luciano Martínez. Jackson Vietto.
Qué más da cómo se llamen. Sacaron pecho, se fajaron, condujeron la tribuna al
éxtasis y al futbol dominical al borde del desmayo emocional.
Avisó Cristiano de sus intenciones
apenas iniciar el juego. Su remate con la testa espabiló a Oblak del
ensordecedor entorno. El Calderón hondeó banderas rojas, azules y blancas, y
cantó a capela su himno para intimidar a otro gigante. Pero cuando en el camino
dos históricos se cruzan, el folclor suele quedar para el anecdotario, porque suficientes
reprimendas de la grada están acostumbrados recibir. Por las ofensas y los
apabullos suele también encallecerse el cuerpo.
Difícilmente ya los grandes se achican.
Al Atlético de Madrid le reprochó su gente en contra del Barcelona de su
timidez y precaución desmesurada, por lo consiguiente –y porque plantilla tiene
la suficiente- adelantó líneas e intentó ser uno más de los temibles de la
liga. Correa se envalentonó a destiempo; vio cómo el ángulo se redujo y disparó
sin rumbo hacia la red externa. Gol fallado, gol en contra. Los adagios gustan
a la hinchada, más si contribuyen a la causa del bloque interesado. Karim
Benzema materializó el esmero madridista con un cabezazo junto al palo
izquierdo, tras un centro de Carvajal por el costado diestro que dejó sembrado
de un amague a Filipe Luis. Demasiado buena y rápida la ofensa para resistir de
nuevo la emboscada.
Tuvo el Madrid fluidez y más tiempo la
pelota. Casemiro alteró a placer con Carvajal la posición por la derecha. Con
Daniel siempre como alternativa para distribuir el juego por las bandas, los de
Benítez ganaron metros y confianza, no obstante enmendaron su baja -por lesión muscular- con Arbeloa, menos válvula de fuga pero más calculador. Justo para entrelazar
los acarreos del canterano con los arrojos de Benzema o de Cristiano estuvo
Isco, la suma de los colchoneros Torres y Correa: con la parsimonia, asociación
y toque de Óliver sumados al drible, esfuerzo y descaro del Ángel argentino.
Nota a favor de los vecinos ricos de Neptuno, a quien se le vio de malas
sabedor de que Antoine Griezmann erró el penalti del empate sobre el ecuador de
la primera parte.
No termina de hermanarse el tercio medio
del Atleti. Tiago aporta idas y vueltas, y quizás Gabi la capitanía además de
resistencia, aunque la ayuda conjunta de Óliver y de Correa debiese ser más
evidente. Óliver avanza menos, y cuando el ‘Niño’ recula, porque Griezmann se
adueña de la punta, ambos se desentienden de la acción subsecuente. Dos hombres
ordenándose en pleno embuste dificultan la sincronía.
En detrimento del ‘10’ rojiblanco, que
está a muy poco de pegar el estirón, Simeone arregló la mengua incluyendo a
Carrasco en el complemento, escenario tijereteado y de muchos roces acompañados
de tarjetas amarillas.
Con el Atleti echado para adelante,
porque enlistó a Jackson Martínez y a Luciano Vietto como referencias en
ataque, el Madrid prefirió volcarse con velocidad por encima de los pases
cortos y las diagonales.
La reaparición de Gareth Bale, quien
estuvo ausente por lesión, otorgó, a la profundidad y al desborde del juego
instruido por Isco hasta su marcha, frontalidad y pegada necesarias para
inquietar a Giménez y a Godín... en par de ocasiones. En ese cambio de papeles,
los intentos de revés fueron constantes por cada bando, no obstante, ni la
inclusión del galés ni el respiro que concedió el técnico madrileño a Benzema
por Mateo Kovacic valió para la estocada definitiva; se acható el Madrid ante
la perseverancia de los del ‘Cholo’, que reivindicó a la dupla Luciano-Jackson,
tan desgastada por su detractores cuando sólo suma la campaña siete fechas
celebradas. El Atlético no arañó el empate en exclusiva, sino que de paso
maltrató el orgullo del patrón de Chamartín.
Ficha
Técnica
1. Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran,
Giménez, Godín, Filipe Luis; Tiago, Óliver (Carrasco 46’), Gabi, Correa (Vietto
58’); Griezmann y Torres (Jackson 64’). DT.- Simeone.
1. Real Madrid: Navas; Carvajal (Arbeloa
42’), Varane, Ramos, Marcelo; Kroos, Modric; Casemiro, Isco (Bale 66’), Cristiano; y Benzema. DT.-
Benítez.
Goles: Benzema (Real Madrid – 9’) y
Vietto (Atlético de Madrid – 83’).
Amonestados: Gabi (Atlético de Madrid –
17’), Ramos (Real Madrid – 21’), Correa (Atlético de Madrid – 39’), Varane
(Real Madrid – 59’), Juanfran (Atlético de Madrid – 60’), Casemiro (Real Madrid
– 61’), Godín (Atlético de Madrid – 88’) y Arbeloa (Real Madrid – 89’).
Árbitro central: Undiano Mallenco.
Asistido en bandas por Díaz Pérez y por Lobato Zancada. Como cuarto árbitro
fungió Gorostegui Fernández-Ortega. Todos pertenecientes a los comités Navarro,
Castilla-León y Vasco.